Es más frecuente que se presente en los bebés y adultos mayores, dado que tienen la inmunidad reducida, o en personas que tienen el sistema inmunitario inhibido o ciertas enfermedades.
Todo tipo de molestia que pueda ocurrir en la boca es un claro sinónimo de dolor y también de mal humor, y en ese mundo de afecciones que figuran entre nosotros se presenta la denominada candidosis oral, que a pesar de todo tiene un diagnóstico y un buen tratamiento, lo cual la hace llevable para cualquier persona.
Lo cierto, es que la candidosis oral (por medio del hongo Candida albicans) se manifiesta, por lo general, con placas blancas en la lengua o en el interior de las mejillas. En ocasiones, la candidosis oral puede afectar la parte superior de la boca y alcanzar las encías, las amígdalas o la parte posterior de la garganta.
Si bien cualquier persona puede tener candidosis oral, la misma es más frecuente que se presente en los bebés y en los adultos mayores, dado que tienen la inmunidad reducida, en personas que tienen el sistema inmunitario inhibido o ciertas enfermedades, o en quienes toman determinados medicamentos a menudo.
Hay que resaltar que la candidosis oral es un problema menor si es una persona sana, pero, si tiene el sistema inmunitario debilitado, los síntomas pueden ser más graves y más difíciles de controlar.
En cuanto a los síntomas que suele mostrar, algunos de los mismos son los siguientes: 1) Lesiones blancas cremosas en la lengua, mejillas internas y, a veces, en el techo de la boca, encías y amígdalas, 2) Lesiones ligeramente elevadas con aspecto similar al requesón, 3) Enrojecimiento, ardor o inflamación que pueden ser lo suficientemente graves como para provocar dificultad para comer o tragar, 4) Sangrado leve si las lesiones se frotan o rascan, 5) Agrietamiento y enrojecimiento en las comisuras de la boca, 6) Sensación algodonosa en la boca, 7) Pérdida del gusto y 8) Enrojecimiento, irritación y dolor debajo de las dentaduras.
En lo que refiere a las causas, en condiciones normales, el sistema inmunitario trabaja para expulsar los organismos invasores dañinos, como los virus, las bacterias y los hongos, a fin de conservar el equilibrio entre los microbios “buenos” y “malos” que, por lo general, habitan en tu cuerpo. Sin embargo, en ocasiones, este mecanismo de protección falla, lo que hace proliferar el hongo cándida y producir candidosis oral.
En tanto, el tipo de hongo cándida más frecuente es el Candida albicans, y hay varios factores, como el hecho de tener el sistema inmunitario debilitado, que pueden aumentar el riesgo de presentar candidosis oral en las personas.
Finalmente, algunas medidas de prevención son 1) Enjuagar la boca: si tiene que usar un inhalador corticosteroide, asegúrese de enjuagarse la boca con agua o cepillarse los dientes después de tomar el medicamento. 2) Cepillarse los dientes al menos dos veces por día y usar hilo dental a diario o con la frecuencia que recomiende su dentista. 3) Controlar su dentadura postiza: quítese la dentadura postiza a la noche y asegúrese de que las dentaduras postizas se ajusten adecuadamente y de que no provoquen irritación, y limpie su dentadura postiza a diario. 4) Preste atención a lo que come: pruebe limitar tu consumo de alimentos que contienen azúcar, 5) Mantenga un buen control de azúcar en sangre si tiene diabetes: un buen control de azúcar en sangre puede reducir la cantidad de azúcar en la saliva y desalentar el crecimiento de cándida.
Es interesante recordar que la salud bucal es fundamental para mantener un buen aliento, sino que también es la entrada para que ingresen otro tipo de enfermedades en el organismo, por eso, una visita regular a un profesional de la salud es recomendable no solo para ver la dentadura sino para estar al tanto que la candidosis oral es más frecuente de lo que se cree entre nosotros.
El objetivo es detener la propagación rápida de hongos, pero el enfoque depende de la edad, estado de salud y causa de la infección. Eliminar las causas de fondo puede prevenir la recurrencia. En niños y adultos saludables, se recomienda medicamentos antifúngicos y vienen en pastillas, tabletas o líquido para hacer buches y luego tragar.
En lactantes y madres que dan de mamar, si está amamantando y su bebé tiene candidosis oral, se pueden transmitir la infección. El médico puede recetar un medicamento antifúngico leve para el bebé y crema para las mamás. En adultos con debilidad del sistema inmunitario, se recomendará medicamentos antifúngicos.